Escribir sobre ti me resulta tan complicado… ¿cómo podría
describir a la mismísima perfección sin insultar con corrientes adjetivos el
sabor que tiene besarte en mitad de la noche?
¿Cómo podría explicarte, que la realidad en tus ojos me
refleja, y me asusta, y me acojonas cada vez que creo ver que realmente es a mí
a quien miras y no a una imagen estereotipada de un personaje ficticio?
Déjame esta noche ser algo más allá de toda fantasía..
déjate tocar por mis manos con la delicadeza de estar rozando mi más ansiado
sueño. Tú no eres ningún personaje, tú eres simplemente…. todo lo que mi
corazón ha buscado desde el mismo instante en que bombeó la primera ráfaga de
sangre a todo mi cuerpo.
Porque cada uno de mis textos te los he escrito a ti sin haberte
conocido, y sin embargo, hoy tiene nombre y apellidos. Tiene los ojos más
intensos que jamás he mirado, tiene la piel más suave que han tocado mis dedos.
Tiene el cuerpo y las medidas perfectas para hacerme perder el Norte, el Sur, y
cualquiera de mis puntos cardinales. Tiene las manos culpables de que me
retuerza cada anochecer, tiene la boca con el nombre del pecado que cometería
cada segundo de mi vida.
Yo no te he idealizado, te he encontrado. Y créeme cuando te
digo que te veo tal y como eres, tú no eres parte de mi imaginación ni de mis
miedos, tú no eres parte de un libro romántico que leer antes de caer rendida
ante el silencio de la noche.
Tú no eres veneno.. eres una droga deliciosa por la que
morir de sobredosis. Eres la conjunción que une el Invierno y la Primavera.
Eres la oración subordinada que subordina cada frase de este texto.
Porque escribir mirándote no tiene precio y sin embargo,
pagaría lo que fuera por retenerte en este instante. Y es que la cama aun huele
a ti y has dejado la habitación llena del sabor de tu piel. Y yo, que pronto
tendré que marcharme y alejarme de ti cientos de kilómetros no puedo parar de
pensar en lo extraño de no estar asustada por esto. Quiero gritarle al mundo
entero que te tengo, que te he encontrado y que haré hasta lo imposible para
conseguir que tú no quieras marcharte nunca. Puedo mover la Luna si me lo
pides, puedo juntar continentes si me lo ordenan tus manos.. Puedo ser lo que
quieras que sea pero sobre todo, quiero ser
el amor de tu vida el resto de nuestras vidas.
Quiero susurrarte en la cama que nunca me rendiré ni me
cansaré cuando todo vaya mal. Quiero casarme contigo un millón de veces en la
playa y quiero que los anillos sean
arañazos en la espalda. Quiero enamorarme en todos los rincones del mundo,
empezando por el tópico Paris haciéndote el amor frente a la Torre Eiffel.
Quiero perderme contigo en Nueva Zelanda, recorrer Australia, visitar Canadá, Croacia,
Atenas y Luxemburgo. Quiero llevarte hasta Marte y allí enseñarte todas y cada una
de las constelaciones que yo veo sobre tu espalda.
Quiero empaparme de
tu cuerpo en cada lago con tu piel desnuda.
Seré todo lo que me pidas que sea, soy tuya y puedes hacer
conmigo lo que quieras.
Morir tendría tanto sentido ahora que he alcanzado el
cielo.. Suena irónico pensar esto y sentir al mismo tiempo la impotencia de no
poder compartir contigo más de una vida.
Por eso, de momento, déjame regalarte la mía.
Desde hoy y para siempre,
Tuya eternamente.
Mónica Gae.